El Gobierno de Cospedal ha iniciado su intención de privatizar, entre otros servicios, el archivo de unas 700.000 historias clínicas que dispone el Complejo Hospitalario de Toledo, según se recoge en el documento que este lunes planteará el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) a los sindicatos para reordenar al personal afectado por la futura privatización de los servicios no asistenciales de los centros sanitarios del área sanitaria toledana, y al que ha tenido acceso El Porvenir.
Así, entre los 302 puestos de trabajo afectados por este plan privatizador, se encuentran 29 auxiliares administrativos y un administrativo del Archivo de Historias Clínicas del Hospital Virgen de la Salud, que recoge la documentación de los pacientes no solo de este centro hospitalario sino de todo el Complejo, es decir, Hospital Geriátrico "Virgen del Valle" y los Centro de Especialidades de Diagnóstico y Tratamiento de Toledo, Illescas, Ocaña y Torrijos.
Queda por saber cómo se gestionará el archivo del Hospital Provincial, integrado recientemente en el Complejo Hospitalario de Toledo, así como del Hospital Nacional de Parapléjicos, si al final el Gobierno de Cospedal consigue llevar a cabo su idea también de que forma parte del Complejo Hospitalario como se plantea en su anteproyecto para reiniciar las obras del nuevo Hospital General Universitario de Toledo.
También se incluyen en ese listado seis plazas del servicio de Documentación Clínica, entre administrativos, auxiliares administrativos y personal técnico no titulado.
El Archivo del Complejo Hospitalario de Toledo es el encargado de custodiar y tramitar la documentación clínica de los pacientes atendidos en sus diferentes centros. Hay unas 700.000 historias clínicas almacenadas, entre ellas un 30% digitalizadas, y se mueven diariamente unas 3.000 historias clínicas en estos centros sanitarios.
La privatización de la custodia y almacenaje de las historias clínicas es un debate que se mantiene abierto desde hace 15 años cuando comunidades gobernadas por el PP, como Comunidad Valenciana y Madrid empezaron a entregar a empresas privadas la gestión documental de sus centros sanitarios.
Mercantilizar datos médicos
Una fórmula que procede del Reino Unido, donde la privatización de los servicios sanitarios comenzó hace cuatro décadas con los gobiernos de Margaret Thatcher, y donde se ha dado un paso más, que en España pueden tener seguidores, especialmente desde la derecha política.
Así, The Guardian publicada el pasado mes de febrero que los datos médicos de los pacientes británicos podrán venderse y comprarse a partir de marzo y de esa manera mercantilizar los historiales clínicos de los usuarios de la sanidad pública en beneficio de las aseguradoras.
Una idea que ya ha lanzado la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) en su informe "Diez temas candentes para la sanidad española". de 2013, como informa la Coordinadora Anti-privatización de la Sanidad Pública de Madrid
En el informe de PwC, se asegura que "la liberación de los datos que se generan en el sector de la salud y su reutilización, generarán beneficios para proveedores, pagadores, administración, ciudadanos e investigadores".
En este sentido concluyen que "la información debe estar disponible como un todo y a un coste razonable" y apela a que "no haya restricciones para ciertos usos como el comercial".
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