Fuente: La Tribuna de Toledo, 30 de agosto
Saavedra confía en que pueda seguir siendo «un referente», a pesar de que en estos momentos haya alrededor de un centenar de personas en lista de espera para horas básicas
La empresa Valoriza Servicios a la Dependencia S.L. seguirá ocupándose
de la prestación del servicio de atención domiciliaria en la ciudad de
Toledo, al haber resultado adjudicataria del nuevo contrato que supondrá
un presupuesto anual de 759.000 euros.
La Junta de Gobierno Local acordaba ayer la adjudicación provisional de
este contrato, de dos años de duración prorrogable por otros dos, a
esta empresa al ser su oferta la que mayor puntuación recibía, entre las
ocho que competían por hacerse con esta licitación.
Una oferta que en el aspecto económico planteaba un coste por hora de
servicio de 16,60 euros, IVA incluido, frente a los 16,95 euros/hora de
servicio que como máximo se fijaba en el pliego de condiciones.
Y aunque entre las ofertas económicas presentadas por las empresas
concurrentes no era ésta la que mejor puntuación obtenía, se convertían
en determinantes para su adjudicación las referencias técnicas, en las
que se valoraban cuestiones como la organización del servicio, los
recursos humanos puestos a disposición para la prestación del servicio o
el proyecto de subrogación del personal.
Así lo ponía de manifiesto la concejal de Bienestar Social, Ana
Saavedra, quien explicaba que esta adjudicación dará «continuidad» a la
atención domiciliaria, puesto que serán las mismas auxiliares las que
sigan atendiendo a los usuarios, lo cual «facilitará que el servicio no
sufra ningún retraso».
Lista de espera. El servicio de ayuda a domicilio de
Toledo ha sido en los últimos años un referente para los puestos en
marcha en otras localidades, tanto por su prestación como por los
profesionales que lo atienden. Desde el Ayuntamiento se pretende que así
siga siendo, a pesar de la repercusión que ha tenido desde principios
de este año, la decisión del Gobierno regional de reducir a la mitad el
número de horas básicas, aquellas sobre las que los ayuntamientos, a
través de los trabajadores sociales, tienen la posibilidad de decidir
quiénes acceden al servicio.
Esta reducción ha llevado a pasar de una lista de espera vacía con
fecha 31 de diciembre de 2011, a tener en estos momentos a «entre 80 y
100 personas» esperando poder acceder a este servicio, «y no poder
atenderlos porque no queda ni una sola hora libre».
Frente a ello, y aquí se da la «gran paradoja», explicaba la concejal,
las horas de dependencia, aquellas sobre las que resuelve la Comunidad
Autónoma, siguen estando disponibles. Horas que no se están cubriendo,
puesto que la Administración regional «no está resolviendo ningún
expediente de la Ley de Dependencia», lo cual se traduce en que no se
esté atendiendo la ayuda a domicilio, ni la teleasistencia, ni las
residencias.
Una situación ante la que la concejal de Bienestar Social pedía a quien
está tomando estas decisiones y recortes «un poco de sensibilidad».
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