martes, 15 de enero de 2013

La Asamblea por una sanidad pública y de calidad anuncia un encierro en el Hospital Virgen de Salud en protesta contra las privatizaciones y recortes




Fuente: www.diariodetoledo.es, 14 de enero

Miembros de la Asamblea por una sanidad pública y de calidad en Castilla-La Mancha han denunciado el cierre de 21 urgencias sanitarias, así como "la falacia que supone la privatización de la sanidad donde los enfermos más caros, los más graves y los casos más complejos se derivan a la sanidad pública." También han denunciado "demoras inasumibles en las listas de espera por los recortes, el copago en transporte sanitario no urgente y que se están reduciendo las pruebas a las mujeres embarazadas".


Para la Asamblea por una sanidad pública y de calidad, "la sanidad privada no es más eficiente como se demuestra en otros modelos como el del Reino Unido". Anuncian que se mantendran encerrados a los largo de todo el día en varios hospitales. También se ha celebrado un encuentro de trabajadores donde se han estudiado nuevas medidas de movilización.

En los últimos meses la situación de la sanidad en Catilla-La Mancha se está deteriorando de una forma drástica. Una región donde se está preparando la privatización de hospitales, cerrando las urgencias de muchos centros de salud y plantas completas de centros hospitalarios, donde los despidos se cuentan por cientos, donde se cierran consultas de tarde, se quitan plazas de médicos y enfermeros, donde las listas de espera aumentan y hay que esperar meses para que te hagan una prueba. Y no digamos ya nada para cirugía no urgente.

Por otro lado, en Toledo y su paralizado hospital en construcción, en breve tendremos el desembarco de las "fórmulas de financiación público-privada, las concesiones de obra pública y la posterior gestión privada". Es decir, la financiación, gestión y prestación de servicios correrá a cargo de consorcios integrados de empresas constructoras (que levantan el edificio), bancos (que adelantan el dinero) y aseguradoras y compañías sanitarias (que gestionan después los servicios sanitarios).

No creemos que digamos nada que no se se sepa ya, si afirmamos que en el proyecto de privatizar y deteriorar la sanidad pública que los gobiernos regional y central están desarrollando, habrá que estar muy atentos a la Multinacional Capio Sanidad, cuya subdirectora de Investigación es Teresa Échaniz Salgado, hermana de nuestro consejero de Sanidad, Sr. Echániz.

Una vez entregado y privatizado el centro, la administración regional pagará un canon anual "de nuestro bolsillo" por 25 años (más o menos) como si fuera un contrato de servicios. Y como a los costes de los servicios y del mantenimiento del centro habrá que sumar el benecificio de la empresa (que se queda con los hospitales para hacer negocio, claro), el coste real aumentará cada año sobre lo acordado, y lo que supondría una gestión pública directa. Es decir, a partir de ahí estaremos, como sucede en la Comunidad de Madrid o de Valencia, ante las revisiones constantes al alza del dinero que la administración pública tiene que poner. Y si la empresa considera que resulta muy caro hacer una prueba diagnóstica, igual no se hace. Desde luego, el negocio es redondo.

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