Fuente: La Tribuna de Toledo, 21 de agosto
CCOO prevé que se darán a empresas con «condiciones de trabajo casi de esclavitud» y CSI.F cree que la externalización es casi segura para los reconocimientos médicos
Los sindicatos con representación en la función pública avisaron de que lo que se debatía ayer no era sólo el futuro laboral de muchos interinos, sino el futuro de la propia Administración. La secretaria de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Carmen López, explicó que la Junta va a «amortizar plazas que tienen su sentido con la excusa de echar a los interinos a la calle». Y teme que lo que vendrá después es que el Gobierno regional va a dar los servicios «a una empresa para que las condiciones de los que trabajan sean casi de esclavitud».
Lo mismo temen en CSI.F, que incluso ya dan casi por segura la externalización de algunos servicios que con la nueva reorganización de plantilla quedarían prácticamente desmantelados. La secretaria autonómica de Negociación, Victoria Ortiz, alertó de que «van a echar prácticamente a toda la plantilla de médicos y enfermeros del trabajo», por lo que da por hecho que la Junta «va a tener que externalizar el servicio con una empresa privada». Ortiz se pregunta si costará más mantener los puestos de trabajo o pagar a esa empresa.
Miguel Guerra, de UGT, también alertó de que «hay servicios públicos que, aplicando el criterio de cese de interinos, van a quedar desantendidos». A la vez, denunció que el Gobierno apenas ha ahorrado un 5% del supuesto 40% de recorte que iba a aplicar en personal eventual y de alta dirección. También criticó que «la partida presupuestaria para alta dirección ha crecido en más de 30 millones para este año».
A los tribunales.
El representante de STAS (la Intersindical), Gustavo Fabra, también ve en estas operaciones que se perpetra «el modelo del PP de pasar de lo público a lo privado». Amenazó con llevar a los tribunales este plan para reestructuración de plazas. «Está basado en un fraude de ley y lo vamos a llevar a los tribunales en caso de que no se retire», anunció.
Por todos estos motivos, alrededor de 200 interinos, protestaron ayer junto a UGT, CCOO y STAS, los tres sindicatos que convocaron una concentración delante de la sede de Administraciones Públicas donde se reunió la Mesa de la Función Pública. Los manifestantes llevaron pancartas y carteles, cortaron el tráfico por unos minutos y caldearon el ambiente con pitidos, cacerolas y petardos. A coro pidieron la dimisión del consejero de Presidencia y Administraciones Públicas, Leandro Esteban, que a finales de julio declaró como desautorizada la instrucción que pedía la supresión del 80% de las vacantes que ocupan interinos.
Victoria Ortiz, de CSI.F, calcula que 700 interinos despedidos suponen alrededor del 60% del total que hay en la Junta. Ahora bien, anuncia que los despidos pueden seguir en el futuro. «Luego vendrán los concursos de traslados, la eliminación de comisiones de servicios y la no cobertura de las plazas que tengan que sustituir por bajas», alertó. También por este motivo, CSI.F mostró su respaldo «a todas las manifestaciones y movimientos espontáneos de los interinos», aclaró su secretario de Acción Sindical, Ramón Caballero.
CSI.F planta a la Junta
Ninguno de los sindicatos implicados entendían que la negociación de ayer era «seria». Por eso tres de ellos, UGT, CCOO y STAS, no querían salir. Y por eso, el que faltaba, CSI.F, no quería entrar. «Ir a una mesa que se convoca para negociar el cese de 700 personas es actuar de comparsa de la Administración», concluyó Victoria Ortiz, secretaria autonómica de Negociación de CSI.F. El secretario de Acción Sindical, Ramón Caballero, la calificó de «farsa» y «pseudonegociación».
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